DENBORA

Esta mañana hojeando el periódico en un bar me he encontrado con este artículo que coincide bastante en una reflexión que me viene a la cabeza con cada vez más frecuencia y que me está animando a dejar la cámara en casa en varias ocasiones:

http://www.elcorreodigital.com/vizcaya/ ... 70909.html

Igual es un poco radical, pero creo que tiene bastante razón.

Saludos

Alex

Supongo que a la mayoría se nos habrá pasado por la cabeza esos pensamientos. Cuando, por ejemplo, he sacado fotos a los fuegos artificiales (lo pongo como ejemplo exagerado porque tienes 10 minutos para hacer algo y eso te estresa) y me preguntan ¿te ha gustado? respondo no sé, estaba pendiente de lo mío.

Pero luego disfruto mucho viéndo las fotos y recordando el momento aunque sea a mi manera. Es curioso, yo tengo una memoria mala mala, vamos que no me acuerdo de lo que hice el domingo pasado, sin embargo, cuando veo una foto mía (de las miles), me acuerdo del momento en que la saqué.

Agur,

Bonita reflexión.

El otro día fuí a recoger a una amiga mía al aeropuerto, venía de Peru. Allí me encontre con una amiga comun a la que había visto en varias ocasiones en diferentes viajes siendo la protagonista de las fotos sacadas por mi amiga. Comentando la cantidad de fotos que nos iba a tocar "tragar" dados los 24 días de viaje, me comentaba que a ella no le gustaba sacar fotos en los viajes porque luego sentía no haber disfrutado de la mitad... yo le dije.. Si, a mi me pasa justo lo contrario, si no saco fotos del viaje siento no haberlo disfrutado... y es así.

Recuerdo, no obstante, que en 2005 fuí a un extraordinario concierto de U2 en donosti. Recuerdo que todo aquel que conocía mi (de aquellas reciente) aficción me decía: "te pondras las botas a sacar fotos", "como te lo vas a pasar con la camara, eeeh"... pues no. Era un concierto y tenía claro que para disfrutarlo no podía estar pendiente de todo aquello de lo que hay que estar pendiente si le sacas fotos. Y menos mal, porque sino estoy seguro que no recordaría con tanta intensidad aquellos decivelios que ponían de punta los pelos de fans y menos fans...

Conclusión, para mí hay que saber ciferenciar cuando va a ser la cámara la que te vá a hacer disfrutar y cuando lo va a ser lo que estaría detras de ésta. Es como las bodas, no es lo mismo cubrir una boda (digo yo) de algún "anonimo" que cubrir la de tu hemana por ejemplo. Si estas pendiente de cubrir la boda te olvidas de los abrazos, piropos, familia y demás... no sé.

Saludos...

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Efectivamente, yo creo que ahí está la clave. Pero yo he pasado por épocas (ahora menos) en las que pensaba que no podía ir a ningún lado sin la cámara.

Menos mal que ahora no estoy en una época de esas.

Saludos

Alex

gran reflexión.

Yo antes hacía más fotos que ahora y llevaba la cámara a más sitios.

Si es cierto que si no hago fotos me quedo con la sensación de que no he estado, pero antes primero miraba a ver si veía la foto, luego hacía la foto y luego miraba lo demás.
Ahora miro lo que hay y de paso, si veo una foto, la hago.
Aunque también es verdad que hay días, épocas y momentos.

Y si un día decides no llevar la cámara, puedes disfrutar de lo que ves. Pero si llevas la cámara y, por ejemplo, se te han olvidado las pilas, seguro que entonces ya si que no disfrutas nada de nada.